Atenas 2004…a la mexicana

Hoy empiezan las olimpiadas, y como siempre nuestro país se entrega al frenesí provocado por las dos principales fuentes de cultura popular: Televisa y TV Azteca, por lo tanto la fiebre por alcanzar el precioso oro, la mediocre plata y el vergonzoso bronce ya esta más que palpable en todos los hogares de nuestro México, lindo y querido, así que no es nada raro que nuestros programas favoritos incluyan segmentos en donde se entrevistan a los niños a la salida de la primaria, mientras engullen sus tostadas con salsa y sus jícamas con limón y chile en donde los pequeños contestan a las preguntas inteligentemente realizadas por los reporteros acerca de los sueños de ser atletas el día de mañana, y no importa si Pedrito tiene severos problemas de obesidad, la inocente criatura con mocos escurriendo sueña con ser campeón en las barras asimétricas, y Juanita, la muy ingenua piensa que sus padres tendrán algún día dinero para inscribirla en una escuela de gimnasia olímpica; en esta temporada de Atenas 2004, se vale soñar.

Como todos sabemos, México se distingue internacionalmente por la mediocridad de sus equipos en cualquier disciplina (con la honrosa excepción de Ana Guevara), aún recuerdo cuando Soraya estaba a la cumbre de su carrera, había quienes decían que gracias a ella, el nombre de las mujeres de México ya estaba en lo más alto en todo el mundo, y si era cierto, lo único malo es que con la difusión que tuvo esta atleta, todo el mundo ha de haber pensado que todas las mexicanas estaban igual de feas y toscas, pero con algo teníamos que pagar la difusión del poder de las atletas mexicanas, ¿no lo creen?.

Las historias son las mismas de siempre…

Las historias son las mismas de siempre, atletas que con mucho esfuerzo y sin ningún apoyo de nuestro gobierno logran sobresalir o ya de perdido estar presente en alguna competencia internacional, y más se tardan en tener algún mérito en cualquier disciplina, de lo que se tarda Vicente Fox en estar hablando vía satélite y en cadena nacional para felicitarlos, asegurando que él siempre había creído en ellos, cuando seguramente no sepa ni con quien diablos esté hablando, y para rematar termina –como siempre- prometiendo apoyos para cuando los atletas regresen a casa, programas de entrenamiento, becas de estudio, y todas esas promesas que sólo se quedan en eso, en promesas.

Lo malo de nosotros los mexicanos, es que vivimos construyendo castillos en el aire en cuanto a justas deportivas se refiere, es más para no ir tan lejos, nosotros no deberíamos ni siquiera de llamarles “justas” deportivas, deberíamos decirles “injustas” deportivas, por que siempre vivimos reclamando que si perdimos por culpa de un juez, que si perdimos por culpa de arbitro, por culpa de la comida, por culpa de la altura, en fin,…en lo que a excusas se refiere, sin lugar a dudas tenemos la medalla de oro. Pero también los que somos espectadores nos damos nuestras mañas para no dejar en evidencia la incompetencia de nuestros equipos deportivos, ya que para el mexicano no importa que el marcador final haya sido por ejemplo: Isla Bazoofia 8 – México 0, para el fanático del deporte mexicano el criterio para calificar la actuación del equipo nacional, no se miden en goles, sino en “intentos de goles”, “jugadas peligrosas”, y en saber “quien dominó más durante el juego”, y no le hace que la siempre incompetente selección nacional no haya ganado. Como lo importante es competir, una vez terminado el juego, hay que ir a celebrar al ángel de la independencia, supongo yo que celebramos que ningún país del mundo nos puede arrebatar los últimos lugares en cuanta disciplina deportiva exista.

Pero eso no se queda ahí,…no, de ninguna manera, una vez que el equipo nacional ha sido apaleado por el rival, toda una legión de adoradores de la mediocridad se dan cita en el aeropuerto en donde se recibe a los deportistas como si fueran un ejército de Nadias Comanecis, y lo más lamentable de eso es que los adultos les inculcan a sus pequeños mentecatos que no le hace que uno pierda en cualquier objetivo que se trace en la vida, que lo que importa es ir a cuanto lugar nos inviten, hacer el ridículo y regresar con los nuestros a festejarlo, y los pequeñines inocentes crecen teniendo como ejemplo a seguir a un puñado de perdedores, pero eso si,…con muchas ganas de seguir luchando, Nota del Phineas: (o con muchas ganas de seguir perdiendo, como quieran verlo) con un muy enaltecido sentido del amor por México, como si por el hecho de andar paseándose por todos lados con el escudo nacional fuera a remediar su incompetencia. Mejor les vendría ser unos atletas de excelencia y retirarse con honores, y no terminar sus carreras como comentaristas deportivos.

Ahora bien, si algo tenemos los mexicanos muy en alto y de lo cual nos sentimos muy orgullosos, es de nuestro sentido del humor, tal como lo expresa la siempre ilustre Consuelo Duval, esta dama que da vida a personajes tan importantes en la TV Mexicana como “Nacasia” y “la matriarca de la familia Peluche” y al siempre excelso, primerísimo actor Adrián Uribe famoso por mostrar sus nalgas en un comercial de medicamentos para combatir almorranas, ellos afirman que quizás los griegos hayan sido muy salsas en filosofía y en cultura, pero que a reírse de las babosadas que uno hace, para eso nomás los mexicanos,…y nadie más!…ya que a causa de estar grabando en un área restringida alguno de sus siempre hilarantes (?) sketches tan llenos de ingenio, fueron detenidos por las autoridades de Grecia, por que –según las autoridades- estaban poniendo en evidencia al estar grabando en lugares restringidos, ¿pero qué cosa tan mas abominable es esa?, si los angelitos están grabando en alguna zona restringida que los dejen,…¡faltaba más!,…como dice Consuelo Duval: “los mexicanos orgullosamente podemos reírnos de nuestros problemas y desgracias” , no como los griegos. En fin esperamos que el compayito (máxima creación de nuestra mitología contemporanea) regrese sano y salvo, así como los demás campeones de la comedia, por que eso si, Grecia puede quedarse con sus grandes filósofos amargados, pero México siempre será campeón en la fabricación de comediantes.

Por lo menos en Grecia, ya están hablando de los campeones mexicanos,…del humor.

http://www.ekathimerini.com/4dcgi/news/content.asp?aid=45836

Y como prueba de que no envidiamos para nada a los grandes filosofos griegos, les dejo esta noticia que como diria el orat,..perdón Jaime Maussan es evidencia irrefutable de la sabiduría popular de nuestro país y que nos debe llenar de orgullo.

http://www.diariolatino.com/2004/08/05/QueVida/Za_za_za_olimpico/

De cualquier forma sabemos que el «za, za, za» esta tan arraigado en el corazón de tantos mexicanos intelectuales, que les tenemos esta sorpresita,…¡¡¡disfrútenla!!!

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