El extraño retorno del Cazacadenas

-Pues así es Cazacadenas, la gente pide…no, exige tu regreso. Así que ¿No podrías hacer el favor y regresar a la página?
-No lo creo…
-Es que la gente lo ha estado pidiendo toda la semana y ya ves como somos sensibles a los reclamos populares.
-Diles que yo ya tengo mi página y estoy a gusto ahí
-Ya les dije pero no sólo no me creyeron, sino que dijeron que se trataba de una m*m*d*
-He encontrado el amor en la música de Shakira.
-Pues a la gente no le importó mucho, sólo quieren que vuelvas.
-¿Les comentaste que me convertí al mormonismo?
-No les dij…¿Te convertiste al mormonismo?
-No, pero igual y eso los convence…
-No creo, así que anda, no te hagas del rogar y escribe algo
-Oh que la…Bueno, envíame una cadena y veré que puedo hacer
-Lo malo es que por el momento no tengo ninguna ¿No podrías ver si te sirve algo de la página?
-Muy bien, con tal de que dejes de jorobar…
-Gracias, muchas gracias Cazacadenas…
-Cierra la puerta de mi oficina al salir grandísimo animal…

Y ahora veamos que puede servirme de este bodrio de página, tiene que ser algo lo suficientemente idiota y aburrido, así que no creo batallar mucho…¡Aja! Creo que esto puede servir…

Mami.. por que ese hombre golpea la cabina de teléfono… (Seguramente porque alguien le está contando esta historia por la línea)
Autor: (El conocidísimo e ilustre)Bomborito Peek.

La humanidad ciertamente es la joya del universo, juntos hemos superado todos los males, los peores azotes y desastres naturales y con la entrada del nuevo milenio, a la sombra de la incertidumbre y de la hostilidad (zzzzz…) natural de la mortalidad con la que hemos nacido, debemos enfrentarnos a la peor, la más grande y la más nefasta amenaza que el ser humano jamás ha enfrentado en todos los tiempos pasados y aún, los tiempos por venir. (…¿los blogs?) “Debemos sobrevivir” ese es mi lema (Un ser egoísta diría: -Mi lema es “Debo sobrevivir” Pero el autor incluye en su lema a toda la humanidad y se agradece tal gesto de bondad, aunque no sea muy lógico) y por eso te invito a que te unas a la lucha contra nuestro más grande adversario en estos tiempos aciagos…

Un adversario que hace que enfermedades, guerras, terremotos, plagas, y toda tragedia que se pueda imaginar palidezca ante la crueldad del suceso (¿Qué suceso?), ante la crueldad y el sufrimiento con el que azota sin diferencia, a todo ser vivo capaz de pensar en este planeta. (Seguramente aquellos que no piensan están a salvo de “la crueldad del suceso”) Sé que ustedes sospecharán a lo que me refiero, sé que no soportan que hable de esta maldad que recorre el mundo entero, sé que esta noche no podrán dormir, (Y en efecto; tal vez nos llegue la madrugada leyendo y leyendo sin que sepamos a dónde quiere llegar…) sabiendo, que tarde o temprano, se enfrentarán ante la amenaza y no dependerá de ustedes salir vivos. Sé que no quieren que lo mencione, pero tienen que saber, que tarde o temprano se enfrentarán a… (¡Con un demonio! ¿¿Con quién??)

Las cabinas de teléfonos de monedas… (Ay que terror Dios mío, no permitas nunca que llegue a toparme con una…¿Cabina de teléfono de monedas? ¿Todavía existen?)
Así es amables lectores, con toda prudencia, trataré de explicar brevemente la maldad con la que se manejan estos seres que acechan en las esquinas de los barrios más jodidos de la ciudad; (Uf, que alivio) por que claro, si no lo sabias, te enteró mi amigo lector, que ya han invadido nuestra ciudad y ahora, mientras tu me lees alguien (de un barrio jodido) esta siendo atacado por la entidad malévola en cuestión… quizá tú puedes ser su próxima victima. (Lo dudo mucho, pero bueno…)

No sabemos como llegaron, sólo sabemos que aparecieron de la nada y que algunos te piden primero marques y después deposites tu lana, otros viceversa, algunos te prometen 1 peso todo el tiempo que quieras… (¿O sea que puedo ir a estas cabinas todo el tiempo que quiera y me van a dar un peso?) pero lo que es verdad, y es un hecho factible y comprobado científicamente es que todos, todos sin excepción, hemos sufrido con estos malditos seres provenientes del averno; (Y bueno: ¿Aparecen de la nada o provienen del averno?) déjeme se los aclaro con un ejemplo: (Si, porque ya me perdí)

Juanelo iba caminando un día por la calle tranquilamente cuando de pronto sintió la impetuosa necesidad de hablar con su novia, Pita…
(¿Qué clase de mamarrachos pueden llamarse así?) Pita, quien la noche anterior se había enojado con él, no le había dirigido ni una llamada en todo el día (Y aunque hubiera querido, no hubiera podido porque Juanelo se encontraba caminando tranquilamente por una calle) y Juanelo con la cruda que llevaba, no se había acordado de ella. Así, tratando de buscar el modo de ponerse en contacto con ella, (Buscando unas ramas para hacer una fogata y poder hacer señales de humo) se percato de que en la esquina más cercana estaba uno de esos híbridos malévolos; Juanelo, un poco incómodo por que no podía recordar haber visto aquel aparato en ese lugar antes, (No, si a mi me pasa igual; cuando veo cualquier idiotez que no recuerdo haberla visto antes, me pongo muy incómodo) decidió acercarse cual ingenua presa se acerca a su depredador.

Una vez estando al umbral del teléfono, decidió sacar una cantidad de monedas que cubrían unos cuantos pasajes de camión de la semana, y así invirtiendo lo poco que le quedaba para recuperar al amor de su vida, Juanelo no se esperaba, que el engendro del mal, tomaría vida propia y haría de las suyas… (En el barrio de Juanelo, cuando aparecía un coche, los niños salían en manada para perseguirlo porque creían que era una carreta mágica que también cobraba vida propia)

Juanelo depositó en el teléfono lo suficiente para una sola llamada de celular y cuando se oyó que en la otra línea Pita contestaba y le decía bueno??… El teléfono maldito cortó la llamada.. Juanelo contuvo la respiración, sudaba frío, (Es que estas cosas aterrorizan a cualquiera) no pudo decirle nada y su acción instintiva lo llevó a fijarse si el teléfono estaba mal… Cuando lo revisó, se percato que en la pantalla de plasma aparecía una leyenda que decía “espere un momento”. Juanelo esperó (Pero Juanelo era mucha pieza como para esperar un tiempo razonable) y apoderándose de él la desesperación, decidió colgar esperando la maquina le regresará su dinero… (Y que Santaclós le trajera todo lo que había pedido de navidad) La maquina no le devolvió nada…. Exasperado murmullo un par de insultos a la compañía (que tenía su sede en el averno, porque recuerden que estas cabinas provienen de dicho lugar) que se dedicaba a producir los teléfonos y decidió intentar una vez más en otro teléfono. No muy lejos de allí, apareció otra cabina telefónica similar a la primera y acercándose, otra vez , inició el mismo rito para comunicarse con Pita, con algo de sigilo, y cuando la línea conectó y de nuevo se oyó la voz de Pita diciendo bueno??.. El teléfono volvió a cortar la llamada… (O probablemente era Pita la que cortaba el teléfono…No, es más lógico pensar que era la cabina maldita con vida propia que nadie sabe de dónde viene y que viene del averno la que cortaba la llamada)

Juanelo se sorprendió, se sintió frustrado, luego enojado y enseguida vociferando unas palabras bastante ofensivas, le recordó la fecha de cumpleaños de su mamá a la compañía que se encargaba de producir los malévolos aparatos y no contento se la recordó también a todos los trabajadores, todas sus esposas, todos sus hijos, y hasta a sus mascotas les tocó tantita embarrada; que laboraren en semejante empresa. (Así de enojado estaba Juanelo)

Juanelo, enojado, se regreso a su casa y (Se olvidó del asunto y le habló a la mentada Pita de ahí ¿Verdad?) trayendo consigo una barreta, intento abrir el aparato para poder vengarse de la diabólica maquina, (Ah, pues sí. Es más lógico eso) pero pesé al sinnúmero de intentos, su exposición a las personas que pasaban cerca de él, y a una acusación de intento de robo con lujo de violencia que llegó unos minutos después; Juanelo no le hizo ni un solo raspón a la maquina de teléfono.

Ahora, Juanelo vive en los separos de nuestra respetada y siempre honorable Policía Preventiva y en las noches es visitado por un amable y muy moreno interno, como de 2 metros de altura al cual lo conocen simplemente como“ El querendón ” (“Juanelo”, “Pita”, “El querendón” Todo muy imaginativo) que se dedica con amor y dedicación a cuidarlo y a ayudarlo a sobreponerse de su encuentro con la diabólica cabina telefónica.

Pero aún cuando es cuidado y atendido, Juanelo puede alcanzar a percibir unos alaridos demenciales y burlescos, algo o alguien que desde afuera de su precaria situación, se regodea en burlas e insultos. (De seguro, los lectores de este disparate)

Entonces Juanelo sabe que quien se burla, no es otra, más que la maquina infernal, que escogió el día menos especial de su vida, para convertirla en la peor de las pesadillas que el ser humano podría tener en sus más profundos, recónditos y ásperos (¿”Ásperos”?) sueños.

Dejó con ustedes el testimonio de Juanelo, no sin antes despedirme con la petición de que (Envíes esta historia a todos tus conocidos…) si vas caminando por la calle y sientes la impetuosa necesidad de comunicarte por teléfono con alguien… no sigas. Puede ser que uno de esos monstruos te este influenciando psíquicamente para que te le acerques y tengas un encuentro de ultratumba con…
Las cabinas de teléfonos de monedas….
(“También si vas caminando y sientes la necesidad de ir al baño, no sigas: Puede que los baños públicos del demonio también te estén influenciando telepáticamente para que caigas en sus garras…” ¡Que idiotez!)

Te saludo y pido tu opinión para saber de que manera podremos sobrevivir a esta amenaza: (¡Yo sé! Pónganse a trabajar y compren un celular)

medjai2001@hotmail.com
(De seguro, el iluso autor pensaba que iban a llover correos de gente preocupadísima, dando ideas de cómo resolver tan grave problema. ¡Bah! ¡El que sigue…!)